192 animes quedaron fuera del catálogo de streaming tras la desaparición del sitio de Funimation
El 2 de abril de 2024 marcó una fecha dolorosa para los fans del anime: Funimation, una de las plataformas más emblemáticas del género, cerró oficialmente su sitio web. Esta acción se dio como parte de la estrategia de Sony tras la compra de Crunchyroll en 2021 por $1,175 millones, con la intención de fusionar ambas bibliotecas bajo una sola marca.
Desde marzo de 2022, el proceso de transferencia de contenido estuvo en marcha. Sin embargo, al llegar la fecha límite, 192 títulos no lograron cruzar el umbral hacia Crunchyroll, quedando completamente fuera del acceso legal por streaming. Entre estos se encuentran clásicos como Gurren Lagann, Galaxy Angel, Astro Boy, Aria the Animation, Black Butler y The Slayers, todos títulos con legiones de seguidores que ahora no tienen manera oficial de verlos.
https://x.com/BigOnAnime/status/1774889223469850663
Fans de todo el mundo se volcaron en redes sociales para denunciar la situación
La noticia no tardó en generar una fuerte ola de reacciones en redes sociales. Usuarios como @BigOnAnime advirtieron que la lista de títulos “sin hogar” no solo era extensa, sino que seguía creciendo hasta el último momento, pasando de 184 a 192 en apenas una semana.
Por otro lado, algunos suscriptores activos de Crunchyroll también alzaron la voz. El usuario @woahitsjuanito expresó su decepción al decir: “Mucho amo Crunchyroll (¡tengo mi suscripción y todo!), pero es realmente vergonzoso lo mal manejada que fue esta transición.” Estas declaraciones reflejan el sentir de muchos fans que sienten que las plataformas, en lugar de proteger la accesibilidad de las obras, están limitando el acceso a través de decisiones corporativas.
Al no estar disponibles de forma legal, algunos fans consideran recurrir a medios alternativos
Uno de los aspectos más controversiales del cierre de Funimation es que deja a los fans sin alternativas legales viables. Aunque algunos títulos aún pueden encontrarse en tiendas digitales como iTunes, los costos son tan altos que resulta inviable adquirirlos todos. Comprar una sola serie puede costar más que una suscripción mensual, y eso sin contar que muchos títulos ni siquiera están disponibles en esas plataformas.
Ante este panorama, muchos fans han comenzado a considerar seriamente la piratería como única forma de seguir disfrutando del contenido. Para algunos, esta práctica se justifica cuando ni las plataformas ni las compañías muestran interés en preservar y distribuir correctamente los títulos que tanto esfuerzo les ha costado a los estudios producir.
La comunidad espera acciones concretas para recuperar los títulos perdidos
La fusión entre Funimation y Crunchyroll prometía una experiencia de usuario más completa, con todo el catálogo disponible en una sola plataforma. Sin embargo, la realidad ha sido distinta. A más de un año del inicio de la transición, muchos títulos siguen en el limbo y no hay comunicación clara por parte de Crunchyroll respecto a su posible inclusión.
Para muchos, esta falta de transparencia es una traición al compromiso adquirido con la comunidad. Si Crunchyroll quiere mantener su liderazgo en el mercado del anime, deberá demostrar que valora a los fans más allá de las cifras. Esto implica actuar rápidamente para asegurar la disponibilidad de los títulos ausentes y ofrecer una explicación clara sobre por qué no fueron migrados.
Lo ocurrido con Funimation reabre el debate sobre conservación, accesibilidad y responsabilidad
La desaparición de casi 200 títulos por una mala gestión de la fusión entre dos gigantes del anime no solo deja una cicatriz en el presente, sino que plantea dudas serias sobre el futuro. ¿Qué garantiza que otras series no desaparezcan mañana si las plataformas no consideran valioso su archivo? ¿Dónde queda la responsabilidad cultural de preservar obras que forman parte del legado del anime?
En Mexgamer.com creemos que es esencial abrir el diálogo sobre nuevas formas de distribución, modelos de suscripción más justos, y estrategias reales para preservar el acceso legal al contenido. La comunidad del anime es una de las más apasionadas del mundo, y merece ser respetada con acciones, no solo con promesas de marketing.
Ahora, la pelota está en el campo de Crunchyroll. Los fans ya han hablado, y el mensaje es claro: no quieren perder más series, ni seguir siendo los últimos en enterarse de lo que ocurre con sus títulos favoritos. El tiempo para actuar es ahora, antes de que la confianza se pierda para siempre.