Un salto de más de 300 años y un cambio total de ubicación marcan el inicio de esta nueva aventura
Ghost of Yotei nos traslada a Japón, pero tres siglos después de los eventos que protagonizó Jin Sakai. Este simple hecho coloca al juego en un territorio fresco, con nuevas leyendas, conflictos e historias por descubrir. Además, se desarrolla en el extremo opuesto del archipiélago japonés, lo que asegura que el ambiente, la arquitectura y hasta el folclore respiren un aire diferente.
Esta decisión narrativa permite a Sucker Punch explorar otros matices culturales y políticos del Japón feudal, alejándose lo suficiente de Tsushima para que Ghost of Yotei sea su propio relato. Sin embargo, este alejamiento físico y temporal no significa un corte absoluto con el legado del “Fantasma”, y puede que la figura de Jin Sakai sobreviva en forma de fábulas o mitos dentro de este nuevo mundo.
Ghost of Yotei busca el equilibrio entre la herencia jugable y las novedades necesarias
Una de las mayores incógnitas cuando se anunció Ghost of Yotei era si su jugabilidad apostaría por innovar radicalmente o seguiría el exitoso molde de su antecesor. Tras el último State of Play, quedó claro que el juego abrazará una fórmula familiar: exploración de mundo abierto, combate basado en precisión y parries, y un profundo sentido de inmersión.
Algunos fans temían que esto resultara demasiado conservador, pero también hay quienes encuentran reconfortante saber que podrán disfrutar de esa misma estructura que tanto los atrapó. Después de todo, las expectativas de un “Ghost of Tsushima 2” giran precisamente en torno a revivir esas mecánicas refinadas de combate y sigilo, solo que en un contexto renovado.
El sistema de pistas e interrogatorios añade capas de estrategia y decisión al jugador
Para no caer en la simple repetición, Ghost of Yotei introduce mecánicas pensadas para profundizar en la interacción con el mundo y sus habitantes. Entre las más llamativas están el sistema de pistas (Clue System) y los interrogatorios, que permiten desentrañar misterios y elegir qué camino tomar. Esto hace que el jugador no solo siga marcadores en el mapa, sino que deba atar cabos para avanzar.
Además, algunos NPCs ahora se acercarán al protagonista, Atsu, directamente en los campamentos, eliminando la obligación de recorrer grandes distancias para desbloquear misiones o historias. Este pequeño cambio promete dinamizar el ritmo del juego, haciendo que el mundo se sienta más vivo y reactivo a nuestras acciones.
El clásico sistema tipo “Simon dice” regresa, ahora con más armas pero la misma filosofía
El combate en Ghost of Tsushima destacó por su sistema de posturas adaptadas a cada tipo de enemigo, obligando al jugador a observar y cambiar constantemente su enfoque. Ghost of Yotei retoma esta idea casi al pie de la letra, solo que ahora con una variedad de armas que funcionan como extensiones de aquellas posturas.
Atsu podrá empuñar katanas, lanzas, kusarigamas, odachis y hasta espadas duales. Cada arma está pensada para ser más eficaz contra determinados adversarios, incentivando a que el jugador cambie de estilo según el combate lo requiera. Así, aunque en apariencia sea una innovación, mecánicamente mantiene el mismo corazón estratégico que enamoró en Tsushima, asegurando familiaridad pero también la posibilidad de nuevas combinaciones.
Ghost of Yotei camina la delgada línea entre evolución y continuidad, con la expectativa a cuestas
Las secuelas siempre enfrentan el difícil reto de satisfacer a una comunidad que desea lo mismo, pero mejorado. Ghost of Yotei parece entender esto al ofrecer una jugabilidad reconocible, pero con herramientas que enriquecen la experiencia. El regreso de elementos icónicos, como los baños termales, suma nostalgia, mientras que los nuevos sistemas de exploración e interacción dan frescura al conjunto.
Desde 10datos.com consideramos que Ghost of Yotei puede convertirse en ese “Ghost of Tsushima 2” espiritual que los jugadores ansiaban, aun sin Jin Sakai. Habrá quienes critiquen que no empuja lo suficiente el concepto original, pero para otros, la promesa de volver a vivir una épica samurái con mejoras significativas bastará para consolidar esta nueva leyenda del Japón feudal. Solo queda esperar su lanzamiento para comprobar si logra equilibrar tradición e innovación.